Para poder degustar un queso con las características que tiene LARREAKO GAZTA, es necesario cuidar todo tipo de detalles en su elaboración.
El proceso de elaboración comienza con el ordeño el cual se hace de forma mecánica.
La leche obtenida se almacena en un tanque de refrigeración hasta la elaboración del queso. En dicho tanque, la leche se mantiene a una temperatura de unos 6ºC aproximadamente.
Para comenzar a hacer el queso, la leche del tanque se pasa a la cuba en la cual se calienta el queso hasta alcanzar la temperatura deseada (30º-31º). Al llegar a dicha temperatura se echa el cuajo y se deja reposar hasta que se forma una pasta consistente que posteriormente es cortada con la lira hasta conseguir unos finos gránulos que luego se prensan para elaborar la masa de la que obtendremos el queso.
Dicha masa obtenida después de todo el proceso se corta y se mete en los moldes tras haber colocado en ellos un trapo para que, posteriomente, el queso haga corteza.
Posteriormente, después del pre-prensado, se les coloca en una de las caras del queso la caseína, una numeración única para cada queso que sirve para su control. Luego se
colocan en la prensa donde permanecen durante unas horas y posteriormente se meten en salmuera para coger el punto de sal.
Cuando se sacan de la sal se meten en la cámara de maduración donde tiene que estar al menos dos meses para poderse vender como queso de D.O.P. Idiazabal